Su lucha a favor de los derecho civiles, especialmente el derecho a la educación de las mujeres en su región, la llevó a ser víctima el 9 de octubre de 2012 de un atentado talibán. Este grupo terrorista había prohibido que las niñas asistieran a la escuela entre 2003-2009.
Malala escribía un blog bajo un pseudónimo, por lo que fue perseguida y amenazada de muerte. Pero, aun así, Malala continuó dando entrevistas y defendiendo sus ideas. Hasta que el grupo talibán decidió de forma unánime acabar con su vida. Y así lo hicieron, disparándole en la cabeza mientras regresaba a casa de la escuela. Se recuperó en Inglaterra, tras un largo proceso de rehabilitación del que salió cuatro meses después.
Malala continúa luchando por el derecho a la educación. Por ello, ha sido la nominada más joven al Premio Nobel de la Paz. La Unión Europea le ha concedido el Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia. Tiene sólo 16 años.
"Un niño, un profesor, un libro y un lápiz pueden cambiar el mundo."
-Malala Yousafzai
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