Formar parte de una red social es algo sencillo. Solo necesitas acceso a Internet.
El principal objetivo de una red social es que las personas establezcan contacto permanente y puedan enviar y mostrar a otras información personal sobre viajes, actividades, intereses, fotos,...
Cada persona que entra a formar parte de una red crea una cuenta. Quien usa esa cuenta accede a la red utilizando una contraseña que es única. La entrada a la red social es voluntaria. También es voluntario, y depende del usuario, decidir con qué personas va a tener contacto dentro de esa red. Igualmente, el usuario puede decidir a qué información va a poder acceder cada persona.
Hay datos que nos indican que las redes sociales han adquirido importancia en todo el mundo no solo dentro de Internet, sino como fenómeno cultura, social e incluso político.
Facebook cuenta en la actualidad con más de 500 millones de usuarios, y una red como tuenti tiene registrados en España más de 5 millones y medio de usuarios. Se calcula que los adolescentes dedican una hora y media al día a las mismas.
Según las últimas estadísticas, un tercio de los jóvenes españoles confiesan ser usuarios de, al menos, dos redes sociales.
RIESGOS DE LAS REDES SOCIALES:
Las redes sociales ofrecen infinitas posibilidades, tales como, entrar en contacto con gente de otros países y culturas, mantener el contacto con personas que viven a larga distancia, intercambiar experiencias y conocimientos, etc.
No obstante, las redes conllevan una serie de riesgos. Los riesgos se presentan en doble dirección. Los menores pueden ser víctimas de alguna de las amenazas o también, por desconocimiento, pueden incumplir alguna de las normas referidas a datos o informaciones personales o de otras personas.
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