El amor es potencia integradora, generadora, sanadora, es un estado auténtico que surge de la conciencia.
A medida que vamos ampliando nuestro conocimiento sobre la vida, el amor cobra mayor fuerza en nuestro interior enraizando con hondura sus conductos más delicados y vehementes. Al tener le interior invadido de amor la vida adquiere su sentido último y esto germina al exterior sin detenerse a pedir permiso, ya que amar es el profundo impulso vital de todo ser vivo por conectarse ecuánimemente con el centro de la existencia y estableces vínculos genuinos con los otros.
0 comentarios:
Publicar un comentario